Cada vez valoro más el método socrático. “Sólo se que no se nada”.
Cuanto más a gusto estoy con lo que hago y creo en ello, te das cuenta de que alguien te desbanca esa idea de tu cabeza.
Cuando más disfruto de estar junto a alguien que quiero, algo sucede que te hace ver la realidad.
Me hace como mi disposición hacia ciertas cosas ha cambiado en menos de 24 horas y se ha convertido en el reverso de la moneda. Todo.
Ni lo que me gustaba sé si me gusta tanto, y tampoco quien me gustaba creo que no me gusta tanto.
Cuanto más estable quiero que se vuelva el firme, más endeble se hace. Y no sé por cuanto tiempo. No puedo bajar la guardia, no puedo descansar… ¿se podrá alguna vez?
Un oscuro presentimiento me ronda, que aún está por suceder. Espero que se quede en rumor. Pero la energía, la siento.
Al final de qué sirven determinadas cosas que hacemos en nuestras vidas. Realmente sirven? . Trabaja para jubilarte. Y si nunca llego a jubilarme? De qué ha servido tanto esfuerzo? Y si mañana muero? Qué he vida he tenido?.
La vida es muy , muy , muy injusta. Últimamente no creo en recompensas, No creo en mucho. No creo, directamente. Al fin y al cabo la fe es creer en algo que no ves…
Yo tendría que haber vivido en el siglo XIX y haber muerto enamorado a causa de la escarlatina, a los 32.Lo sé. Esta forma de vida últimamente, pega bien poco conmigo.
Pobre Mrgreen, iluso tú, que sigues sin aprender la lección que tanto te cuesta. Aprende, asume y calla.
Mrgreen